La fisioterapia y la osteopatía son disciplinas complementarias que buscan restaurar la movilidad, reducir el dolor y mejorar la calidad de vida del paciente.
La fisioterapia se centra en la evaluación y tratamiento de disfunciones musculoesqueléticas, neurológicas y viscerales, utilizando técnicas manuales, ejercicio terapéutico y educación para la prevención de lesiones y la recuperación funcional.
La osteopatía, por su parte, es un enfoque global que analiza las restricciones de movilidad en el cuerpo y busca restablecer su equilibrio mediante técnicas manuales específicas. Se basa en la idea de que todas las estructuras del cuerpo están interconectadas y que cualquier alteración en una zona puede repercutir en otras.
La importancia de la fascia en la fisioterapia y osteopatía
La fascia es un tejido conectivo que recubre músculos, órganos y estructuras del cuerpo, proporcionando soporte y facilitando el movimiento.
La fascia no es solo un envoltorio, sino un tejido activo con capacidad de contracción.
Responde a la carga mantenida y a cambios en el pH, adaptándose a las tensiones del cuerpo y desempeñando un papel clave en la estabilidad y el movimiento. Su papel en la transmisión de fuerzas y la biomecánica es crucial, ya que una fascia alterada puede generar restricciones de movilidad, dolor y disfunción. En fisioterapia y osteopatía, trabajamos con técnicas específicas para liberar tensiones en la fascia, restaurar su elasticidad y mejorar la función global del cuerpo.
¿Qué trabajo en consulta?
Fisioterapia de Suelo Pélvico
La Fisioterapia Uroginecologica o Reeducación del Suelo Pélvico es una especialidad de fisioterapia que previene, trata y mejora las distintas alteraciones del suelo pélvico. El suelo pélvico es un conjunto de músculos y ligamentos que cierran la cavidad abdominal en su parte inferior. Su función es sostener los órganos pélvicos (vejiga y uretra, útero y vagina, recto) en la posición adecuada porque de ello depende su normal funcionamiento. La menopausia, el envejecimiento natural, multipariedad, algunas prácticas de obstetricia, cirugía pélvica, actividad deportiva, estreñimiento… son algunos de los factores que influyen en las alteraciones funcionales del suelo pélvico.
¿Qué patologías trato?
El papel de la fascia en el suelo pélvico
La
fascia endopélvica es un componente clave en la estabilidad y funcionalidad del suelo pélvico. Actúa como una
red de soporte biomecánico que conecta los órganos pélvicos con la musculatura profunda y el esqueleto, influyendo en la
continencia urinaria y fecal, la función sexual y la estabilidad lumbopélvica.
La fascia no es sólo un tejido de relleno, sino una
estructura dinámica y continua que influye en la postura y el movimiento global del cuerpo. Su disfunción puede generar compensaciones en regiones como la zona lumbar o la cadera, desencadenando dolor crónico, disfunciones del suelo pélvico y alteraciones en la movilidad.
La
fisioterapia de suelo pélvico, emplea técnicas como la
liberación miofascial, la reeducación postural y la estimulación manual para mejorar la movilidad y funcionalidad de la fascia endopélvica. Estas intervenciones no solo ayudan a reducir molestias, sino que también optimizan la respuesta neuromuscular y la biomecánica de toda la región pélvica.
No sólo es cuestión de hacer Kegel y de fortalecer musculatura. Ambos, suelo pélvico y fascia, no puede considerarse como un elemento aislado, sino como una
pieza esencial dentro del sistema fascial global.
Su cuidado adecuado y el tratamiento de sus disfunciones son fundamentales para mantener una pelvis fuerte, estable y funcional.
Se recomienda acudir a consulta si presentas:
Preguntas Frecuentes sobre Fisioterapia del Suelo Pélvico